A una altura de 3.800 metros sobre el nivel del mar, específicamente en la Laguna Santa Rosa de la Tercera Región, Conaf y Sernatur Atacama celebraron el Día Internacional de la Montaña en Chile, una actividad muy relevante para el turismo nacional si consideramos que Chile será sede de la Cumbre Mundial del Turismo Aventura en el 2015.
En el Parque Nacional Nevado de Tres Cruces ubicado en la cordillera de la Provincia de Copiapó y a casi 3800 metros sobre el nivel del mar, el guardaparques César Pizarro ejecutó una charla acerca de la biodiversidad y su equilibrio para el entorno del parque nacional. El profesional explicó que durante enero se realizará el censo internacional simultáneo de flamencos, al cual se suma este año la Corporación Nacional Forestal (Conaf) de Atacama.
Un grupo de visitantes recorrió los vestigios arqueológicos que existen en el borde de la laguna y posteriormente, se desarrolló el campamento con los grupos de montañistas y las personas interesadas que participaron de esta actividad, para lo cual se pidió, como requisito esencial, poseer salud compatible con la altura y disponer del equipamiento necesario para soportar las condiciones del clima en altura. Tras pernoctar en el parque nacional, la ascensión al cerro siete hermanas que se encuentra al este de la laguna Santa Rosa.
El director regional de Conaf, Ricardo Santana, afirmó que con esta celebración del Día Internacional de las Montañas “estamos satisfechos con la participación creciente de la comunidad en las distintas actividades organizadas en Atacama por esta celebración. Estamos seguros de que hemos contribuido a conocer, valorar y proteger las montañas, así como hemos avanzado en acuerdos de trabajo insospechados para aprovechar sustentablemente el potencial turístico, natural, patrimonial y cultural de nuestras montañas”.
Cabe destacar que la Región de Atacama es la única en Chile y Sudamérica que desde el 2010 celebra con regularidad el Día Internacional de las Montañas, que fue creado el año 2003 por la Asamblea General de las Naciones Unidas como una oportunidad para crear conciencia de la importancia que tienen estos macizos para la vida, de señalar las oportunidades y las limitaciones que afronta el desarrollo de las zonas montañosas y de crear alianzas que produzcan un cambio positivo en las montañas y las tierras altas del mundo.