Hace tres años que un golpe de Estado destituyó al Presidente Manuel Zelaya en Honduas y lejos de estabilizarse, la nación aún sufre los estragos de la inseguridad -el 2011 cerró con 86 asesinatos por cada 100 mil habitantes -una realidad que ha llevado al sector turismo a situarse, en lo que refiere a la cantidad de visitantes, en uno de los últimos de Centroamérica.
Nelly Jerez, ministra de Turismo de Honduras, atribuyó a la inseguridad la baja en el flujo de visitantes y reconoció que se atraviesa un mal momento en el giro, publica el diario La Tribuna. Entre las cifras que ilustran lo anterior están los 11 mil 726 empleos menos reportados en el 2011 en relación con el año anterior, aunque Jerez afirmó que a pesar de ello están en mejor situación que en etapas precedentes.
En iniciativas como Copán 2012, Bahía de Tela, Dos por Uno en La Ceiba, los reality shows en las islas de la Bahía y la próxima apertura de un muelle de cruceros en Trujillo, se cifran las esperanzas de los empresarios turísticos hondureños para remontar el actual declive.
Las insuficientes conexiones aéreas y promoción internacional conspiran también contra el auge turístico, caracterizado por el predominio de los panoramas urbanos en detrimento de los paisajes naturales, debido a los congresos internacionales y las gestiones de negocios.