Municipios usan 40% del presupuesto por aumento de basura y delincuencia.
Es por eso que los municipios de estas playas invierten hasta mil millones de pesos sólo en los meses de verano, lo que en promedio representa el 40% de su presupuesto anual.
Ni alcaldes ni vecinos critican la presencia de los turistas que llegan principalmente de comunas de escasos recursos de Santiago, como Puente Alto y La Pintana. Lo que lamentan todos son sus efectos.
El alcalde de El Tabo, Emilio Jorquera, afirma que en tres meses debe aumentar la frecuencia de los recolectores de basura, las farmacias de los consultorios quedan vacías en marzo y debe contratar a un tercio más de guardias municipales.
La alta demanda en seguridad se repite en El Quisco y en Cartagena. Jaime Ferrer, presidente del Consejo de Seguridad Pública de El Quisco, asegura que en verano los delincuentes no sólo roban a peatones y en casas, sino que destrozan las plazas, bancas y postes de luz. «Con los 20 policías que hay no se puede hacer nada», lamenta Ferrer.
Para el edil de Cartagena, Osvaldo Cartagena, los problemas se deben a la falta de recursos. Por eso junto a otros balnearios presentó a la Subdere un proyecto para que el Estado subsidie a las comunas que reciben veraneantes más pobres. «Ellos también tienen derecho a veranear con dignidad», enfatiza.
Fuente: El Mercurio