La incesante actividad sísmica que se registra en Chile, no sólo ha alertado a la población residente, sino también a los turistas, especialmente a la gran cantidad de visitantes argentinos que han llegado a las costas y no están habituados a estos fenómenos naturales.
El año pasado, muchos turistas argentinos vivieron “en carne propia” el embate del terremoto y maremoto del 27 de febrero, razón que les llevó a replantearse si regresar o no este año a las costas chilenas. Pese a lo anterior, un gran porcentaje prefirió volver.
No obstante, el temor de ser testigos de algún sismo de proporciones se hizo realidad para muchos. Y es que en los últimos días se han registrado una serie de sismos de gran intensidad en toda la zona central, que han despertado los temores entre los turistas. Incluso, quienes vacacionaban en el sur de Chile, pudieron sentir la fuerza del temblor que alcanzó los 6,8 grados Richter.
Un solo antecedente a tomar en cuenta: Durante el cambio de veraneante registrado el último fin de semana, el número de argentinos que regresó a su país por el paso Los Libertadores fue mayor al que comúnmente retornan en dicha fecha. La situación incluso ha llamado la atención de los responsables de la aduana del sector transandino, quienes calificaron la situación como «poco normal».